Kufonisia

¡No, no estás en el cielo! Estás en Pano (superior) o Kato (inferior) Kufonisia, las dos gemas conocidas como las Kufonisia. Ambas, junto a Iraklia, Donusa y Shinusa, conforman las Pequeñas Cícladas. No solo reciben este nombre por ser menos conocidas que sus hermanas mayores, sino porque, a pesar de su tamaño reducido, irradian la magia de las Cícladas por todo el Egeo.

Aguas cristalinas, arenas que brillan cual polvo de hadas y cuevas para los piratas del pasado y los aventureros del presente. Degusta los sabores y disfruta de una música inspirada en vivencias bajo la luz de la luna. Aquí hay lugares donde la diversión nunca se detiene, así como también ubicaciones secretas llenas de paz, tranquilidad y relajación.

¿Qué hacer en las Kufonisia?

Donde menos es más

Hay belleza en la simplicidad. Puede que Pano Kufonisia (la isla habitada de las dos) no cuente con el lujo que caracteriza al resto de las Cícladas, sin embargo, ofrece todas las comodidades y es un portento de belleza natural impoluta. A pesar de ser la más pequeña de todas las islas Cícladas habitadas (10 km²), ha estado atrayendo viajeros de todo tipo durante los últimos 20 años.

Sumérgete en un sueño esmeralda

Litorales dorados, aguas tranquilas y costas arenosas. ¡El deseo de sumergirte en las aguas del Egeo será irresistible cuando estés aquí! Finikas, Fanos, Italida, Pori... incluso hay una playa llamada La Piscina (Pisinia) que hace honor a su nombre.

Explora en barco

Si existe un lugar para visitar en barco, son las aguas que rodean a estas islas. No son solo las playas escondidas las que esperan ser descubiertas, sino también un manto de imágenes exóticas teñido de innumerables tonos de azul, verde y turquesa.

Todos los caminos conducen a... ¡Hora!

Es imposible que no pases por el único asentamiento en las Kufonisia —la Hora (pueblo) de Pano Kufonisia—, un microcosmos cicládico que te invita a pasear por sus pequeñas calles. Macetas de geranios, paredes blancas y tardes donde los lugareños charlan y cotillean en sus banquetas. La ciudad cobra vida por la noche: los turistas socializan con los lugareños y el ambiente se vuelve vibrante y divertido. Los extraños intercambian miradas cálidas y mantienen conversaciones en voz baja mientras que la dulce música te tienta como el canto de una sirena.

El tesoro oculto de las Kufonisia

Las cuevas marinas

Cuenta la leyenda que los piratas se escondían en las cuevas marinas del lado norte de Pano Kufonisia. Y no es difícil ver por qué. Impresionantes refugios han sido excavados por las olas en las cercanías de playas liliputienses. Es el lugar perfecto para los amantes del snorkel y la pesca.

Keros

Por la noche, desde Pano Kufonisia, puedes ver a lo lejos la silueta de mujer de la pequeña isla de Keros. De día, Keros revela su grandeza arqueológica. Un sitio protegido y, para algunos, aún más importante que Delos, es el pueblo natal de Arpisti y Avliti, las tradicionales figuras de un flautista y un arpista representados en muchas obras de arte cicládicas.

La exótica Kato Kufonisia

Hay alrededor de diez edificios en total y una famosa taberna, pero ya nadie vive aquí. Definitivamente deberías hacer una excursión de un día en esta isla, tomando uno de los barcos que parten regularmente desde el pequeño puerto de Pano Kufonisia. Puedes explorarla a pie. Las playas Nero, Pezoulia y Fikio esperan por ti.